¿Sabías que en un puñado de tierra puede haber más organismos vivos que personas en el mundo?

Podemos encontrar vertebrados, invertebrados, hongos, líquenes, plantas y millones de microorganismos. Según la FAO los suelos albergan más del 25 % de la biodiversidad de nuestro planeta.
Todo este mundo de criaturas alimenta y protege a las plantas y ellas, a su vez, nutren el suelo manteniéndolo sano y fértil, haciendo posible nuestra alimentación.
Su importancia es tal, que se estima que el 95 % de nuestros alimentos se producen directa o indirectamente en nuestros suelos.
Así, nuestra nutrición depende de la disponibilidad y el equilibrio de los nutrientes que el suelo le dé a nuestros alimentos. Cuanto más biodiverso es el suelo, más nutritivos serán.
De ahí la importancia de mantener suelos saludables que garanticen la seguridad alimentaria y la nutrición del mundo, y de consumir productos cultivados con prácticas de agricultura regenerativa, que ayudan a mantener la tierra sana para que la vida pueda florecer.